El color de la ilusión.

Publicado el : 11/09/2017 13:28:10
Categorías : Relatos sobre capturas Rss feed

Me llamo Daniel o como mi Nick me identifica… “El Gazpachuelo”, nombre que elegí por ser tan Malagueño como yo. Decir que me crié junto a la playa, pescando desde pequeño, tanto en pesca deportiva como profesional. De adulto había probado ya todas las modalidades hasta que hace varios años llegue al mundo del kayak. Que decir de esta modalidad de pesca que para mi punto de vista no tiene comparación con ninguna otra. Comencé a probar distintas técnicas de pesca que nunca había utilizado antes, como es al vivo, con la cual probé varias veces sin resultado alguno, por lo que no sabía si lo estaba haciendo bien o mal, hasta que llegó el día señalado…

Ese día comenzó como cualquier otro día de pesca, madrugón y con nervios por saber si sería el día clave. Kayak al agua y yo con él. Comencé buscando el vivo con mucho trabajo porque ese día no había, después de hora y media y remando con dificultad por el oleaje y la deriva, conseguí coger una caballa (la que se convirtió en una de las más importantes de mi vida).

¡A COMENZAR A PESCAR!

Peska en kayak

Primero llegar al sitio que ya me costó lo mío, y en la primera pasada ¡ZAS! ¡PICADON!. Después de unos minutos pude subir al kayak mi primer Dentón, el más bonito que había cogido nunca. Rematé de desengancharlo y lo guardé. Me dí cuenta que la sonda me indicaba un banco de pescados justo debajo, lancé las plumillas nuevamente y a la primera cogí otra caballa y vuelta a empezar… otra hora remando para poder dar otra pasada. Llegué extenuado y ¡ZAS! ¡OTRO PICADON!, nuevo Dentón que después de pelearse por escapar de mí y muy a su pesar subió a bordo. Como los tres no cabíamos y yo iba un tanto cansado, volvimos a tierra firme, yo contento y los Dentones no tanto. Esto fue lo que dio el día, que no me lo imaginaba ni en mis mejores sueños.

pesca en kayak

Este es el color de la ilusión… plata, azul, violeta, los colores mas increíbles que se puedan ver en un pescado de este calibre, ese brillo sin igual, indescriptible.

Bueno, espero que os haya servido mi pequeña historia de un maravilloso e increíble día para demostraros que no se puede perder la ilusión, que quien la sigue la consigue. Decir que me sirvió para saber que lo que estaba haciendo estaba bien, lo único que peces de este tamaño y porte, por desgracia no hay muchos en nuestros mares. Lo dicho, con paciencia y una caña todo se pesca.

pescar en karak

pesca en kayak

Share